Rechazo a proyecto de energía eólica

Emite el Centro de Investigaciones en Ecosistemas de la UNAM una opinión científica en contra de la instalación de torres de generación de energía eléctrica por viento en la isla de Cozumel, la cual, dice el estudio, tiene la posibilidad de perder mucha de su riqueza natural por este proyecto.

Desde hace tiempo que el millonario proyecto para establecer los gigantescos aerogeneradores en la isla, concita el rechazo de ecologistas y cada vez más ciudadanos, pero es la primera vez que esa oposición se puede sustentar en lo que siempre piden autoridades y empresarios: evidencias científicas.

Desde septiembre del año pasado se elaboró este dictamen sobre el proyecto eólico en Cozumel, pero en la isla no se había dado a conocer nada al respecto y, al contrario, siempre se nos dice por parte de las autoridades que no hay motivo de preocupación porque el proyecto ha tomado en cuenta todos los factores y ha sido aprobado por expertos.

Sin embargo, ahora podemos afirmar que esto no es del todo cierto porque, de hecho, la opinión emitida por este centro de investigación dependiente de la UNAM, concluye que el proyecto tendría un profundo impacto ecológico sobre la isla y su biodiversidad; tal como lo argumentan los ecologistas.

El documento, firmado por el maestro en ciencias Héctor Perdomo Velázquez, del Centro de Investigaciones en Ecosistemas, UNAM, del cual tenemos una copia, consigna las conclusiones de este investigador, quien afirma:

Emitido el 13 de septiembre del 2011, entre otros datos consigna lo siguiente: “a continuación enlisto una serie de hechos y datos basados en investigaciones científicas para que se tomen consideración en la planificación del proyecto Parque Eólico que se planea establecer en Cozumel.

Cozumel es la isla más importante de especies endémicas de México debido a la cantidad de fauna endémica que habita sus ecosistemas. Existen cerca de 30 variedades de vertebrados que tienen la pequeña superficie de Cozumel como hábitat, y entre las cuales destacan 19 variedades de aves.

Cozumel es el hábitat de 224 especies de aves, las cuales se desplazan por toda la isla buscando refugio, alimento y sitios de anidación. Dadas las condiciones estacionales de Cozumel y la disponibilidad de agua en la selva y manglares, las aves en Cozumel realizan migraciones locales a distintos cuerpos de agua.

Cozumel es un sitio muy importante de migración de aves de distintas regiones ya que se encuentra localizada en un punto donde confluyen aves de la Península de Yucatán, de la región de Islas del Caribe y de aves que migran cada invierno desde Norteamérica.

En Cozumel se han registrado cerca de 50 especies de aves que migran y habitan en Cozumel, cada año desde agosto a marzo. Se sabe que la ruta de entrada a la isla incluye toda la parte de manglares y lagunas al norte de la isla, a donde llegan, descansan y se abastecen de alimento para luego establecerse en diferentes sitios de la isla con vegetación conservada.

Debido a la geografía y disponibilidad de agua en Cozumel, las aves tienen como principal ruta migratoria local dos corredores que van de norte a sur por cada extremo de la isla.

Se debe promover la conservación de la mayor cantidad de superficie con vegetación nativa y original de Cozumel dada la importancia de su fauna endémica, y por ende, evitar cualquier tipo de desmonte, apertura de caminos o construcción que impida la conectividad de las áreas con vegetación.

Por estudios internacionales, se sabe que el efecto del ruido por torres eólicas puede afectar hasta 2 kilómetros de distancia desde la torre, debido al ruido que producen el cual se mantiene constante entre 94 y 104 decibeles. Por la noche este efecto se torna aún más problemático cuando el ruido natural de un sitio desciende debajo de los 30 dB y entonces los generadores eólicos se tornan la principal fuente de ruido. Se ha encontrado que los generadores producen ruidos infrasónicos los cuales son imperceptibles para el oído pero que sí tienen efectos negativos sobre otros animales. Lo anterior puede afectar los patrones de conducta de la fauna de la selva de Cozumel, así como evitar la llegada y desove de las tortugas marinas que evitan sitios perturbados”. (Segunda parte mañana)

Fuente: Por Esto!