Director del IMSS niega negligencia en la muerte de un menor de edad

El pequeño de catorce años de edad que falleció por un derrame cerebral en el hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en cualquier momento podría haber muerto, debido a que nació con una alteración neurológica, por ello tenía en su cerebro una “válvula de Pudenz” que sirve para liberar al cerebro de tensiones debido a líquido que tuviera en esa parte de su cuerpo, y al descomponerse, en cualquier momento podría desencadenar en este lamentable final, señaló Jesús Mateos López, director del IMSS.
En su derecho de replica, el director del IMSS, manifestó primeramente que no hubo negligencia médica porque esa palabra significa abandono (aunque también significa descuido, omisión, y falta de aplicación). Expuso que el niño Gerardo Ciau Nahuat de catorce años nació con un problema neurológico y por ello “tenía en la cabeza una válvula de Pudenz, que sirve para liberar al cerebro de tensiones debido al líquido o agua que tuviera en su cerebro”.
En su explicación dijo que a los familiares se les había dado a conocer desde entonces que está válvula en cualquier momento se podía disfuncionar o descomponer, lo que lamentablemente ocurrió derivando el desenlace fatal. Y en el caso de Gerardo Ciau Nahuat, tuvo la fortuna de que viviera varios años, porque es difícil que los niños con este problema puedan llegar a la edad adulta, dijo.
Respecto al derrame cerebral, comentó que “se entiende el porque, al no funcionar la válvula, al taparse una válvula, provoca que todo ese líquido provoque un edema cerebral y obviamente una consecuencia de estas condiciones”.
Recalcó que no todos los pacientes que tienen este problema pueden vivir largo tiempo, además de que no pueden caminar, pues tarde que temprano presentan complicaciones con un triste final como el de este niño.
De acuerdo a sus palabras, en el hospital del IMSS no hay abandono como muchas veces señala la gente, porque a los derechohabientes se les canaliza con los doctores adecuados y algunas veces los casos más graves terminan con un final lamentable.

Fuente: Por Esto!