Buenas prácticas higiénicas implementadas por la epidemia de AH1N1, logró disminuir las enfermedades gastrointestinales; sin embargo, al pasar la alerta y volver todo a la normalidad, se elevó el numero de enfermos con diarreas y males estomacales.
Roberto Lozano López, epidemiólogo del Hospital General, explicó que las enfermedades gastrointestinales se originan por el mal manejo de los alimentos y malos hábitos de higiene, aumentando los riesgos en temporadas de calor debido a que los alimentos se descomponen con mayor rapidez y los vientos trasladan las bacterias que contaminan los alimentos de las calles, lo que ocasiona problemas estomacales.
Ante esto, recordó que en 2009, cuando se presentó la alerta por la influenza, se adoptaron medidas extremas de higiene para evitar el contagio, por lo que se disminuyeron los casos de enfermedades diarreicas y estomacales, por lo que recomendó lavarse siempre bien las manos y tener mucho cuidado de la comida que se consume.
Fuente: Quequi
4 de febrero de 2011
Medidas sanitarias por calor
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