El asunto de la pipa que investiga la Contraloría Municipal volvió a dar un nuevo giro. El ex titular de Servicios Públicos del Ayuntamiento, Rafael Quiñones Quiñones, advirtió que los culpables de este problema siguen en casa, es decir, permanecen en las oficinas de palacio.
Quiñones Quiñones explicó que cuando fue adquirida la pipa en 2009 se le entregó a él un resguardo, pero que once meses después la unidad falló y fue llevada a un taller; en tiempo y forma se le notificó por escrito al director de Patrimonio Municipal, Fernando Marrufo Canto, quien de manera, negligente, apático e irresponsable, no le prestó importancia al asunto, debido a que la administración de Juan Carlos González, estaba por concluir.
Lo grave del caso, es el hecho de que Marrufo Canto, a pesar de que sabía que la pipa estaba fuera de circulación, cometió un acto de omisión y negligencia al no actualizar el Inventario del Patrimonio Municipal, por lo que al momento de realizarse la transferencia de gobierno a la actual administración, la pipa apareció en el Inventario como una unidad activa, es decir en servicio.
La actitud del hasta ahora director de Patrimonio Municipal, además de constituirse como una traición o engaño al gobierno actual, significa un acto de deshonestidad y de desconfianza, toda vez que hasta este momento no se ha interesado en rescatar la unidad que permanece en un terreno baldío, además que sigue sin reclamar la devolución de una escalera telescópica que fue robada hace cuatro meses.
Marrufo Canto era también director de Patrimonio Municipal, cuando el entonces contralor municipal Carlos Isabel Quijano Mendoza, vendió a remate como chatarra, varias patrullas que tenían simples fallas, de acuerdo a testimonios de trabajadores del taller del ayuntamiento.
El ex director de Servicios Públicos Municipales, dijo que al concluir la administración de Juan Carlos González, funcionarios como Carlos Isabel Mendoza Quijano, Fernando Marrufo Canto, y otros que permanecen en el gobierno, lo acusaron como el responsable de haber abandonado la pipa en un taller.
"Apenas salí del ayuntamiento, vinieron las acusaciones en mi contra, pero en esta carpeta tengo todas las pruebas que sustentan y verdad y que los verdaderos culpables sigue en el gobierno", indicó Quiñones Quiñones.
Dijo que el contralor municipal de la pasada administración, Carlos Isabel Mendoza Quijano, actual subcontralor, tenía la obligación de dar el visto bueno para la reparación de la pipa e investigar qué fallas presentó, así como exigir la actualización del inventario por parte del titular de Patrimonio Municipal.
Fuente: El Quintanarroense
29 de agosto de 2011
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