Continúa maltrato de caballos de calesa

Falta personal para aplicar el reglamento del Centro de Control Animal (CCA), desinterés de las autoridades y apatía por aplicar una norma para proteger los animales que rige en el estado desde marzo de este año, son algunas de las causas que atribuye la presidenta del grupo ambientalista Cielo, Tierra y Mar (Citymar) al maltrato que sufren los caballos caleseros en Cozumel.

El último accidente protagonizado por estos jamelgos ocurrió hace dos semanas en pleno centro de la ciudad, donde el animal resultó bastante lastimado.

Usuarios en las redes sociales denuncian maltrato de los equinos y hacen un llamado para evitarlo.

Facebook, red social que hasta julio de este año contaba con 500 millones de usuarios en todo el mundo, tiene fotos, nombres y fechas de los accidentes, en el que se denuncian el maltrato a los caballos que se hace en Cozumel.

La exposición a nivel mundial que significa esta red y la mala imagen que le da al destino turístico, parece no ser suficiente para poner un alto a los concesionarios de las calesas en la isla.

El director del CCA explicó que hay 36 caballos que son utilizados por cinco concesionarios de este servicio. Pese a los malos tratos que se han denunciado, a ninguno de ellos se les ha revocado los permisos.

Según el artículo 45 del Reglamento de Control Animal en la municipalidad, los caballos deben descansar obligatoriamente 36 horas, pero sólo se cuenta con un supervisor para que se aseguren de que esto se cumpla.

Se ha detectado que su estado físico es lastimoso y presentan heridas provocadas por el equipo de tiro, que es de baja calidad y hecho en casa.

Las herraduras que utilizan no son las adecuadas para caminar en el pavimento, sobre todo en el resbaladizo suelo del malecón. "Esto les provoca lesiones", afirmó.

La sanción por no utilizar una herradura adecuada es de apenas 450 pesos.

En lo que va del año sólo se han multado en 10 ocasiones a los operadores de las calesas debido a que sus caballos presentan inflamaciones y heridas. La sanción es de cinco mil pesos, pero hay reincidencia.

De acuerdo con el artículo 45 antes mencionado, está prohibido que las calesas transporten a más de cuatro personas, pero esto tampoco se cumple.

La muerte de los caballos también se debe a los cólicos que sufren por las noches, esto derivado de que en los ranchos donde viven no cuentan con botiquín ni atención veterinaria constante, así lo afirmó el titular del CCA, Rodolfo Hernández Velasco.

fuente: Novedades de Quintana Roo