2 de abril de 2012

Nueva plaza comercial junto al muelle SSA

Con una inversión de más de 40 millones de dólares, la plaza comercial que se ubica frente al muelle internacional de cruceros SSA, busca atender nichos de mercado diferentes a los que ya existen en la zona y ha logrado que importantes marcas se interesen en llegar a la isla en alguno de sus locales.

La nueva plaza comercial Royal Village traerá a Cozumel a importantes marcas de ropa y equipo deportivo, restaurantes temáticos y otros negocios de franquicia con gran prestigio que actualmente no operan en la isla.

Algunas de estas marcas serán Adidas, Reebok y Deportes Martí, que ya opera. Asimismo, franquicias que ya no existían en la isla, como Kentucky Fried Chicken, estarían regresando en esa plaza, además de otras que ya han tenido una larga presencia en el mercado local y son de prestigio internacional como Hard Rock Café.
Es la misma instalación con cuyos promotores, el ayuntamiento pasado firmó un convenio en apariencia inocente sobre el uso de un paradero de taxis construido en su interior, el cual se ha ido complicando hasta volverse un problema para el actual gobierno municipal, que no ha podido resolverlo.

Sin embargo, de acuerdo a sus constructores, lejos de provocar un conflicto, lo que este lugar pretende es completar la oferta turística de toda esa área.

Enrique Lozano Carbonell, director corporativo encargado de la plaza, explicó en entrevista exclusiva, que de hecho, se dieron órdenes de no rentar espacios en ese lugar a locatarios que pretendieran migrar desde los cercanos muelles SSA –enfrente- y Puerta Maya, -a unos 500 metros al sur- para no caer en malentendidos con las terminales marítimas, que tienen sus propios espacios comerciales.

Además “queríamos evitar vender las mismas cosas que las ya disponibles en el área y por eso, hemos tratado de traer a marcas diferentes, lo que beneficiará a todos y creará empleos bien remunerados en la isla”.

Aseguró que el problema con el paradero de taxis también a ellos les tomó por sorpresa y que su única pretensión fue acabar con el caos vial y las filas de taxis que llegaban a medir cientos de metros y afeaban toda la zona, pero que no desean conflicto alguno sino que se utilicen las instalaciones sin perjuicio de otros negocios y que se alivie el problema de la saturación de transportistas en el área, donde cuando están los muelles llenos, llegan a desembarcar diez mil o más personas en un lapso breve.

Son más de 40 millones de dólares de inversión y según Lozano Carbonell, ya alrededor del 80 por ciento de los espacios están ocupados.

Fuente: Por Esto!

0 comentarios: