Engañosa reunión de la ONU

El entorno ecológico de Cozumel se encuentra en constante amenaza, y a la isla se le toma como mero banco de materiales para reparar playas de otros destinos mientras aquí los hoteles no tienen arena, y varios proyectos amenazan los manglares pero cuentan con la bendición de las autoridades locales en proceso; sin embargo, la isla fue sede del encuentro sobre medio ambiente de la ONU que se clausura este viernes.
A partir del pasado miércoles, Cozumel se convirtió por primera ocasión en Sede del Foro de la Sociedad Civil del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA).
Según el gobierno municipal, “en este evento que se lleva a cabo en el hotel Park Royal, participan representantes de las organizaciones civiles de Cozumel que (supuestamente) trabajan en el cuidado del medio ambiente, quienes trabajarán con representantes gubernamentales y de otras organizaciones civiles de América Latina y el Caribe, como son Panamá, Argentina, Brasil, Perú, Trinidad y Tobago, Colombia, Cuba, Paraguay, Ecuador, Nicaragua, Costa Rica y México. A lo largo de tres días abordarán temas relacionados con el medio ambiente, que serán expuestos a los ministros en el Foro Mundial a realizarse en febrero de 2011”.
Lo curioso es que entre esas “organizaciones civiles de Cozumel que trabajan en el cuidado del medio ambiente”, no están incluidos grupos incómodos al poder, como el conocido Cielo Tierra y Mar, Citymar, que recientemente abanderó el reclamo contra la extracción de arena, sino sólo los grupos “ecologistas a modo”, meros membretes al servicio del poder y de los intereses en turno, y cuya única función real es mantenerse disponibles para acudir a este tipo de foros y abrogarse la representación de la “sociedad civil de Cozumel”, sacarse la foto y firmar lo que sea, dando máscara de legitimidad a graves abusos ambientales cuyas pruebas están a la vista en toda la costa insular, marcadamente en la parte suroccidental, la zona del parque marino.
Cozumel ha perdido así buena parte de sus manglares y ahora mismo, la zona de Punta Tormentos, sitio Ramsar desde el año 2005, se encuentra amenazada por un nuevo “desarrollo” que rellenará laguna y mangle pero tiene licencias estatales y municipales, además de que se trata de un terreno que el propio gobierno del estado vendió a particulares.
La isla fue tomada a fines de 2009 y principios de este 2010 como un banco de materiales del que se extrajeron más de seis millones de metros cúbicos de arena que fueron dragados en un proceso que terminó con el hábitat del caracol rosado, pero permitió reparar artificialmente, aunque sea por unos meses, las playas erosionadas de Cancún y Playa del Carmen.
En el otro lado de la isla, la última zona virgen de Cozumel, sigue la presión inmobiliaria y hasta el presidente municipal electo ha dicho que “afortunadamente” el empresario Donald Trump “sigue interesado”, con lo que eso de que “Cozumel cuida su entorno” resulta, por lo menos, impreciso y tramposo.

Fuente: Por Esto!