Ante la prepotencia de Ignacio Cureño, no se ha encontrado una solución al conflicto que hay con los usuarios de la Caleta y está a punto de perderse una millonaria inversión a través de la Marina Fonatur, que traería más beneficios a la población, mucho más que la ridícula construcción de banquetas en las colonias.
El “flamante” director de la Administración Costera Integral Sustentable (ACIS), estuvo a punto de perder la concesión del año pasado, debido a su ineficiencia para dirigir la dependencia, que bien podría generarle ingresos al Ayuntamiento a través de los cobros que recaudan por el uso de muelles y espejos de agua, como lo hace la APIQROO; sin embargo, el tener que cumplirle favores a la mayoría de los concesionarios de quienes recibe favores, hace que no ingresen dinero a sus arcas, aunque sí se sirve del puesto para sacar beneficio personal.
Por sentirse intocable, se ha vuelto soberbio y prepotente, al grado tal que por esas “virtudes” es que los usuarios de la Caleta no quieren firmar los convenios para salirse de la misma y pasarse a la Marina de Fonatur cuando se concluya, ya que no confían en sus falsas promesas.
Esta es la principal razón por la que no ha podido concretar el acuerdo con los propietarios del Hotel Presidente, que a cambio de ceder un espacio de su terreno para hacer la bocana de la Marina, quieren la concesión de la caleta, la cual hay de destacar se esta proponiendo cedérselas por la ridícula cantidad de un millón de pesos anuales, a cambio de recibir una jugosa regalía por el convenio.
Fuente: Quequi
26 de noviembre de 2010
Prepotencia de Cureño
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