¿Para qué sirve la Profeco?

La Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) no tiene la facultad para sancionar a los propietarios de tortillerías en caso de aumentar sus tarifas, debido a que los precios que se manejen para la venta de este alimento se basa en la oferta y la demanda, informó el abogado conciliador de esta dependencia en Cozumel, Darwin Pech Martínez. Explicó que lo único que regula la unidad de servicios en Cozumel de la Profeco, es que los precios estén a la vista de los consumidores para evitar engaños y que las básculas que se utilicen en estos negocios estén calibradas con el holograma de este 2010, para garantizar que les otorguen la cantidad exacta de tortillas que solicitan.
Darwin Pech Martínez mencionó que la única dependencia que tiene la facultad para realizar sanciones, con relación al incremento injustificado o indiscriminado del precio del kilogramo de tortilla, es la Secretaría de Economía, pero en el caso de Cozumel nada se puede hacer debido a que no hay ninguna representación de dicha dependencia.
Dijo que en el caso de que se registre un incremento en el precio del kilo de tortilla, el cual actualmente se mantiene en 14 pesos, lo que podría suceder es que los consumidores dejen de comprar en dichos establecimientos y opten por adquirir el producto en los supermercados, donde la tarifa que se maneja es mucho más económica.
En este caso, el precio que se maneja en los supermercados es más bajo hasta en 50 por ciento, pero Pech Martínez manifestó que los consumidores tendrán que evaluar esta situación.
Agregó que para un consumidor no es tan cómodo hacer largas filas en los supermercados para comprar sus tortillas y otra para hacer el pago en las cajas registradoras, como tampoco podría ser factible en caso de que viva lejos y tenga que utilizar algún transporte para llegar hasta los supermercados, por lo que en caso de querer ahorrarse algunos pesos pudiera estar gastando más dinero al llegar hasta estas tiendas de autoservicio.

Fuente: El Quintanarroense