Culpa juez al MP

Después de que diera un “portazo” en las narices a los representantes de diversos medios de comunicación, negándose a dar entrevistas, ahora resulta que la secretaria de Acuerdos en funciones de juez, Lorena Karina Ayuso Magaña, siempre sí puede hablar con los medios, pero sólo para culpar al Ministerio Público del Fuero Común, de haber integrado mal el expediente con el que ella dictó un auto de formal libertad a un presunto abusador de menores, al menospreciar los testimoniales de la agraviada (de 5 años), los médicos y psicólogos que atendieron a la pequeña.

El pasado 21 de marzo, Ayuso Magaña dictó el auto de libertad al presunto abusador de una menor de 5 años, Alan Hernández Badillo, basada en que, durante el desahogo de pruebas, no se presentaron pruebas contundentes de que la menor hubiera sido abusada sexualmente y tomó en cuenta los testimoniales de la madre del inculpado, propietaria de la estancia infantil Casita de Monserrat, y las empleadas que de igual manera tienen vínculos familiares.

En materia de delitos sexuales, experimentados abogados en la isla, coinciden en señalar que por considerarse un delito grave, basta la sola imputación de la víctima para que se dicte el auto de formal prisión al inculpado, y en este caso fue muy clara la señalización de la menor en contra de Hernández Badillo, al decir que le había tocados sus genitales e introducido papel.

Entrevistada la mañana de este martes, Lorena Ayuso dijo que su fallo fue fundamentado en las pruebas y los elementos que aportó la fiscalía del MP, y mencionó que estuvo mal integrado el expediente ya que no contenía pruebas ni un dictamen médico o psicológico que avalara la acusación, pues sólo había documentos públicos del médico legista y la psicóloga del DIF Municipal, que no son dictámenes periciales.

ES BIPOLAR

Cabe destacar que en los pasillos del Juzgado Penal de Primera Instancia se habla de la bipolaridad de la jueza en funciones, quien vive problemas emocionales que afectan su trabajo, ya que ella misma ha mencionado a sus compañeros que poco le importa lo que diga o piense la sociedad, pues considera que está tomando decisiones apegadas a derecho y sólo quiere quedar bien con sus superiores.

fuente: Quequi