Nada levanta a los pequeños

Infructuoso resultó éste como los demás puentes de asueto a lo largo del año para los hoteleros del centro, porque no incrementó la ocupación e incluso es tan pobre que un hotel que opera desde hace más de 20 años cerró temporalmente sus puertas.
Gilberto Caamal, gerente encargado de reservaciones y ventas de céntrico hotel, dijo que en nada benefició este minipuente que recién terminó, porque al ser temporada baja poco turismo viaja. Comentó que la mayor parte de sus huéspedes son gente que viene a la isla por cuestión laboral y al haber un puente, por la misma razón se abstienen de viajar y la pasan con sus familias en sus lugares de residencia.
Este fin de semana apenas tuvo el 30 por ciento de habitaciones ocupadas de las 53 que componen el hotel. Consideró que no se ha visto ningún beneficio con los puentes que se implementaron a lo largo del año.
Gustavo Rivero Morales, administrador de otro negocio del giro, dijo que no les fue nada bien con este puente. Hasta este lunes al medio día, únicamente tenían rentados dos cuartos de los 15 que conforman el hotel. Opinó que esto es a causa de la poca promoción que hay del destino, aunado a que cuando lo hacen las autoridades, sólo se habla de los hoteles de playas y a los que operan en el primer cuadro de la ciudad no los toman en cuenta.
Por esa razón, externó que la gente que llega lo hace con una referencia del centro de hospedaje a donde va y se evitan de andar buscando opciones en el primer cuadro de la ciudad. Pide que sean tomados en cuenta ya que de igual forma pagan el 3 por ciento de impuesto sobre el hospedaje, y este dinero debería de servir para promocionar al destino y echar a andar un mecanismo de publicidad que beneficie no sólo a los hoteleros de la zona de playas, sino a toda la industria turística. Al finalizar, dijo que este año fue sumamente difícil y sólo alcanza para subsistir y para operar el negocio.
Por su parte, José María Aguilar Palma, ex encargado del hotel Cozumel Inn, culpó a lo caro de los cruces de barco como lo que propicia el escaso turismo en Cozumel.
Por la baja ocupación que tenían en el hotel donde trabajaba fue el factor para que terminara sucumbiendo al no poder continuar operándolo, ya que no había nada de ocupación, había que pagar a los empleados y desde hace poco más de diez días se cerraron sus puertas, luego de poco más de 20 años de funcionar.
Dijo que el dueño del hotel adoptó esta medida porque ya se le hacía arduo tener que pagar los impuestos, los pagos de luz y agua, que terminaron por ahogar al negocio, aunque dijo que va a aprovechar el tiempo para remodelar este hotel.

Fuente: Por Esto!