14 de agosto de 2010

Buscan solución para acabar con fétidos olores

Los fétidos olores que se han estado percibiendo por las noches cerca de las instalaciones de la base número uno de la Comisión de Agua Potable y Alcantarillado (CAPA) es a causa del rebombeo de aguas negras que proviene del rastro municipal, que desemboca en un pozo de alcantarilla a escaso metros del sitio, el líquido arrastra entre otras cosas, descargas sanitarias, sangre y suciedad de los animales, por ello directivos de la CAPA entablarán pláticas con el responsable del matadero para tratar que la operación de rebombeo se realice en horas de la madrugada para no perjudicar a las personas, dijo Juan Buenfil Dorantes, subgerente técnico de la CAPA.
De acuerdo a lo informado por el funcionario, cerca de la base número uno de la CAPA, localizada en la avenida Juárez con 95 avenida, donde se almacena una importante cantidad de agua que se distribuye a la población, se han estado percibiendo malos olores entre las 19 y 20 horas de la noche.
Dijo que el desagradable aroma se debe a la descarga de aguas negras del rastro municipal que se vierten dentro de un pozo de alcantarilla ubicado a escasos metros del lugar, específicamente en el cruce de la avenida Juárez con la 100 avenida.
Señaló que estuvieron monitoreando el problema para detectar de dónde provenía estos fétidos olores, y fue que lo ubicaron, razón por la cual directivos de la CAPA local procederán a entrevistarse con el director del rastro Martín Luna, para buscar una solución, entre la que sobresale que el rebombeo que se hace entre 19 y 20 horas sea cambiado y ahora lo efectúen por la madrugada a fin de evitar mayores molestias a los habitantes de la zona y a los diversos conductores de vehículos que pasan a diario por el sitio. Tentativamente podría ser a la una de la madrugada.
Expuso que incluso trabajadores de la CAPA, le notificaron que cuando llegan las lluvias, este pozo que recibe las descarga de aguas negras del rastro se satura, provocando que rebose su contenido, entre lo que hay “parte de las vísceras, parte de la suciedad de los animales, la sangre, entonces la contaminación es bastante fuerte y los olores son bastantes fétidos”, concluyó.

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