Por el momento, los molineros acordaron descartar toda posibilidad de incrementar el precio del kilogramo de tortilla, ya que esto pudiera generarle severas repercusiones, tales como la disminución de sus ventas ante la captación de pocos clientes o la reducción del consumo de este alimento milenario en los hogares cozumeleños. Los proveedores del Estado de Yucatán informaron que a partir del 15 de enero los molineros pagarán mil 500 pesos adicionales a los 8 mil 600 pesos que sufragan por cada tonelada de harina, lo que representa un fuerte golpe para el sector.
Por tal motivo, un principio los molineros planearon la posibilidad de un incremento en la tarifa de 16 pesos que se maneja actualmente para vender cada kilogramo de tortilla, sin embargo, esto ya no sucederá, así lo informó la presidenta de la Unión de Molineros, Tomasa Uc Chan.
Subrayó que ante algún incremento en el precio del alimento milenario, los molineros corren el riesgo de perder clientes o que estos reduzcan su consumo, adquiriendo menos producto para llevar hasta la mesa de sus hogares.
Es esta situación la que han evaluado los molineros para descartar cualquier incremento a corto plazo, derivado del aumento en la harina de maíz, el insumo principal que se utiliza para la elaboración de este alimento.
Los propietarios de las tortillerías afiliadas a la Unión de Molineros, ya han sostenido pláticas y llegaron a un acuerdo, el cual es continuar cobrando los mismos 16 pesos que se ha estado manejando desde el año pasado, para la comercialización de cada kilogramo de producto.
Para los molineros los grandes supermercados son una fuerte competencia, ya que en estos se maneja una tarifa más baja para la venta de este producto, quienes podrían captar más clientes con sus precios económicos en caso de que se apruebe un incremento por parte de los propietarios de las tortillerías.
Fuente: Diario de Quintana Roo
13 de enero de 2012
No subirá la tortilla
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